UNO: LA CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL
Las tres revoluciones industriales previas han traído cambios épicos en la economía: la máquina de vapor, la producción en cadena y la tecnología de internet. Hoy, estamos en los albores de lo que suele llamarse Cuarta Revolución Industrial: Internet de las Cosas (IoT). Con ocasión del Congreso celebrado en Barcelona en otoño 2015, Bosch publicó esta infografía en la que definen su visión de la realidad de la nueva era enfocada a una vida más fácil y mejores oportunidades de negocio.
DOS: LA ENCRUCIJADA DE LOS MODELOS DE NEGOCIO, SENTARSE Y ESPERAR NO ES LA SOLUCIÓN
Internet ha transformado el negocio de las comunicaciones tanto como el panorama de los medios, el comercio mayorista o minorista o las industrias culturales. La digitalización y los nuevos desarrollos tecnológicos se han hecho mayores y quienes no estén preparados están condenados a desaparecer aunque hayan sido líderes de mercado durante décadas. Como consumidores, nos adaptamos rápidamente a todos los cambios y nuevos entornos, con productos y servicios novedosos y nuevas formas de hacer lo que estamos acostumbrados. Hoy nadie usa un walkman de cassettes, pero seguimos escuchando música por la calle usando servicios de streamming en nuestros smartphones.
Para muchas empresas, la mera perspectiva de rehacer productos tradicionales o analógicos en otros inteligentes y conectados es desalentadora. Pero asumir esa necesidad de cambios es mucho más que un reto. Los nuevos modelos de negocio se basan en esa capacidad de convertir el «core business» en procesos tales como la gestión de productos, operaciones y producción, así como las ventas y gestión de canales de forma conectada. Y, dado el dinamismo de la red, las innovaciones deberán ser implantadas cada vez más rápido.
TRES: DISPOSITIVOS EN 2011, MÁS QUE UN JUEGO DE NÚMEROS
Con una previsión de 14 mil millones de dispositivos conectados y 3 mil millones de interfaces de usuario, los smartphones y tabletas dejarán de ser considerados como simples dispositivos aunque estén conectados a internet, sino interfaces que permiten a los usuarios consumir servicios y productos basados en Internet de las Cosas como modelo de negocio nativo, como las apps o alertas.
De acuerdo con la firma de analistas Machina Research, esos miles de millones de dispositivos irán desde coches con IP habilitada a sistemas de calefacción, cámaras de seguridad, sensores y equipos pesados de producción industrial. Estos números se basan en el supuesto de que cualquier herramienta, maquinaria o accesorio esté conectado directa o indirectamente a la red. Eso significa que un automóvil conectado es un dispositivo en sí mismo, pero a su vez cuenta con numerosos accesorios y equipamientos también conectados, desde los navegadores y sistemas de entretenimiento a los detectores de seguridad, testera, etc.
CUATRO: CINCO MERCADOS POTENCIALES EN EL HORIZONTE 2022
Los directivos han de ser capaces de imaginar las posibilidades de negocio que representan las magnitudes de usuarios y la demanda de soluciones que el nuevo entorno de Internet Of Things aparece en el horizonte inmediato. De nuevo Machina Research estima que los beneficios de esta industria virtual fusionara con el mundo físico representan en torno a 596 mil millones de euros, a repartir entre todos los actores del sistema.
De todos los sectores, los cinco en los que mayores oportunidades habrá son: Edificación, Automoción, Servicios Públicos, Smart Cities y Producción Industrial.
Todos estos sectores, por descontado, generarán una industria de las telecomunicaciones y la información moviendo unos 4 millones de terabytes. Para hacerse una idea de lo que esto supone, imagine una librería digital con todos los títulos catalogados del mundo en todos los idiomas y sólo ascendería a 480 Terabytes. Un terabyte de audio en calidad CD contendría alrededor de 2.000 horas de música.
El nuevo terreno de juego.
Hoy la relación con un fabricante a menudo termina cuando sus productos llegan al almacén del distribuidor, o como mucho, en el punto de venta. Internet of Things cambiará esa perspectiva radicalmente, pues los proveedores y fabricantes estarán ofreciendo productos y servicios de valor añadido con sus dispositivos conectados. Tanto el feedback de información como el servicio post venta podrán o deberán hacerse directamente sin contar con intermediarios y contarán como factor de venta al usuario final.
CINCO: FACTORES DE ÉXITO
Crear Ecosistemas.
Para poder controlar todos los aspectos de los desafíos que Internet de las Cosas propondrán, será necesario crear ecosistemas empresariales comparables a un arrecife de coral donde se pueden encontrar diversidad de especies conviviendo en simbiosis con un desarrollo compartido. Y ese ecosistema debe ser amigable para todos los que lo integren, basados en la colaboración más que en el viejo modelo de presas donde el pez grande se come al pequeño. La estructura de arrecife permite a todos mantenerse con vida y adaptarse a los cambios. Las decisiones se toman en equipo y los competidores son a menudo socios también, compartiendo mercado y valores.
Innovación como modelo de negocio
Uno de los principales objetivos de las empresas es mantener y ampliar las relaciones comerciales con sus clientes. Los servicios de valor añadido y los nuevos modelos de negocio son una herramienta fundamental para lograrlo y representan nuevas oportunidades. Las tecnologías IoT permiten ofrecer propuestas a viejos clientes tanto como captar nuevos, enriqueciendo sus servicios, obteniendo más información, mejorando la eficiencia y diferenciando de los competidores.
Espíritu emprendedor
El mundo conectado y digital es altamente volátil y dinámico, y la tarea de los empresarios y directivos es darle forma aprovechando constantemente los cambios que se van presentando. Esto incluye estar preparado para lidiar en nuevos entornos que se van presentando a alta velocidad de forma muy parecida a cuando se pone en marcha una nueva compañía. Así, Internet de las Cosas hace recomendable estructuras de empresa divididas en pequeñas unidades de negocio independientes, ágiles que exploren continuamente sus entornos y aprendan a prevenir y minimizar los riesgos, pero al mismo tiempo desde una perspectiva global.
Puedes descargar también el White Paper de Bosch sobre cómo capitalizar IoT en su web.