Según el Panel de previsión del Gobierno del Reino Unido, dirigido por Dame Clara Furse, la negociación algorítmica, o High Frequency Trading, pronto reemplazar la toma de decisiones humana en los mercados de valores. Muchos países ya han empezado a reemplazar a los humanos: una tercera parte del comercio del Reino Unido lo realizan ordenadores y las tres cuartas partes de la negociación de Estados Unidos es generada por Inteligencia Artificial.
Algunos beneficios que el grupo de estudio ve son la mejora en la liquidez, reducir los costos de las transacciones y mayor eficiencia del mercado.
Cuestiones a mejorar
Cuando el 7 de octubre de 2016 la Libra Esterlina sufrió una caída inesperada, se hizo evidente que pudo ser debido a la intervención de los algoritmos.
En otra época, ese tipo de caída habría sido el resultado de un importante evento o consecuencia de un desastre natural o error político, pero en el mundo de la tecnología actual, probablemente tenía mucho más que ver con los sistemas automatizados.
Aunque una de las ventajas que proporcionan los sistemas de negociación en los parqués basados en algoritmos es evitar las decisiones tomadas de forma impulsiva o emocional, o incluso interesada, de las personas, gracias a la Inteligencia Artificial, los sistemas automatizados de comercio pueden ser configurados para rastrear los titulares de noticias y reaccionar a la información con un movimiento del mercado.
Los datos son recogidos y analizados y un algoritmo de decisión se crea en base a los deseos preestablecidos de un inversor. Si el precio se mueve a un nivel predeterminado, el ordenador empieza a vender, llevando el precio hacia abajo y automáticamente los otros algoritmos se unen. La venta continúa hasta que el precio alcanza el nivel preconfigurado para ”comprar», y los ordenadores revierten el curso y logran el precio de reserva.
Estos algoritmos permiten que monedas y acciones puedan ser compradas y vendidas a precios específicos en cuestión de segundos, todo ello sin la intervención humana.
También pueden analizar grandes cantidades de información y gestionar el Big Data mucho más rápido que los humanos.
Por ello, el documento señala que mientras que los humanos serán reemplazados en el comercio como brokers, se incrementará la necesidad de desarrolladores de algoritmos.