Los equipos informáticos están en todas partes y las oficinas sin papel, o la Administración Pública, hacen que sea la principal herramienta de trabajo en casi todos los sectores, del terciario al primario llegando hasta la Agricultura. Sin embargo, los fabricantes de equipos no pasan por su mejor momento y el sector del PC atraviesa una profunda crisis de la que saldrá sólo modificando sus estrategias actuales.
Según un estudio publicado por IDC, las ventas mundiales de PC en 2015 alcanzaron los 71,9 millones en el cuatro trimestre, registrando un descenso interanual del 10,6%. siendo el primer año en el que no superaron los 300 millones de unidades desde 2008.
Las causas que apunta IDC para explicar este descenso son los ciclos de vida de los propios equipos, que ya no necesitan ser renovados con tanta frecuencia (seguramente porque sus prestaciones son más que suficientes para un uso basado en la nube principalmente) así como a la competencia de tablets y smartphones. Ni siquiera el lanzamiento del nuevo Windows 10 supuso el habitual motor de ventas que anteriores sistemas operativos generaron.
Existen sin embargo dos realidades que pueden cambiar el sentido de estas cifras de venta. Por un lado las tablets con teclado que podrían empezar a considerarse como auténticos PC aunque actualmente se analicen los datos de unidades vendidas por separado, y el crecimiento de uno de los actores que, de nuevo, ve aumentar su cuota de mercado. Nos referimos, como ya imagina, a Apple.
Si se cuentan en conjunto, las ventas de PC más tablets crecieron un 6% en el cuarto trimestre y un 3% en todo el año 2015. Esto reduciría el descenso hasta valores entre el 7,5 y el 5%.
En EEUU quien mejores ventas obtiene es HP con una cuota del 28,1%, mientras que Dell consigue la segunda posición con una cuota de 23,9%. Apple consiguió romper la tendencia de un mercado erosionando en los PC de consumo, logra el tercer puesto con una participación de 12,7%. Aunque en cuanto a crecimiento anual Lenovo fue el que mejores resultados obtuvo con su 21,3% gracias a 2,2 millones de unidades vendidas.
Sin embargo, no fue suficiente para superar Apple y cayó al cuarto lugar en el ranking. ASUS logró un 11,0% de crecimiento año tras año hasta alcanzar una cuota de 7,1% adelantando a Toshiba y Acer.
Los efectos de la normalización del PC
No solo la competencia de los smartphones y las utilidades basadas en cloud computing o las apps están afectando a un mercado que parecía lograr un puesto tan de consumo masivo como cualquier electrodoméstico. Eduardo Archanco en El Espectador Digital, apunta a la falta de diferenciación real entre marcas y equipos por parte del consumidor.
“El mercado del PC está sufriendo los efectos de la comoditización con todo su poder. HP no vende más que “cajas”, pantallas, teclados y ratones muy parecidas a las “cajas”, pantallas, teclados y ratones de Dell o de Acer” Apunta.
Entre las pruebas que aporta para llegar a esta conclusión y cómo Apple, que sigue una estrategia distinta a todos las demás marcas y por eso sigue creciendo, señala que todos utilizan los mismos chips de Intel, memorias de los mismo proveedores e incluso un mismo sistema operativo. Que los contenidos web sean ya accesibles desde cualquier ordenador o dispositivo, completa el panorama desolador para la competencia entre unos y otros. “Cuando vendes productos con el sistema operativo de otro, tu producto es tan bueno como el precio de tu competidor – añaden citando a Ben Bajarin.
El contraataque de Intel
Aunque Intel siga siendo el principal proveedor de chips para los PC, si el mercado global del mismo cae, como hemos visto, su negocio también. Por eso, la compañía está centrándose en otros mercados como Internet de las Cosas, fotónica de silicona y los FPGA, Field Programmable Gate Arrays, es decir, componentes de centros de datos y tecnologías conectadas. Según Brian Krzanich, CEO de Intel, El enfoque de la compañía está cambiando para impulsar mejoras en los servidores, la memoria, las redes y los componentes de almacenamiento a nivel de rack. Especialmente, trabaja en mejorar la aceleración de la comunicación entre componentes. La idea, explican, es separar los procesadores, la memoria y el almacenamiento en cajas separadas del rack, de esta forma se puede mejorar la flexibilidad y la potencia en la instalación de servidores preparados para Big Data, por ejemplo.
Fruto de este trabajo es Omnipath, una tecnología de interconexión ultra rápida, pieza central de las nuevas arquitecturas de servidores, puerta de entrada a la supercomputación. En el futuro, Intel prevé la transferencia de datos a velocidades más rápidas mediante haces de luz, gracias a la fotónica de silicio que reemplazará a los cables de cobre tradicionales.
Fuente: IDC press release e ITNews.